sábado, 31 de diciembre de 2011
DÍA 64: ¿Paris?
viernes, 30 de diciembre de 2011
DÍA 63: Y el que mucho espera...
Dicen que las cosas buenas se hacen esperar. Y bueno. A las 6am fue el primer tren. Empezamos 7 y terminamos 4. Pasamos de frío helado a un calor delicioso para cerrar con un frío aterrador. Vimos nieve, montañas y playas. De italiano a francés. Venecia, Milano, Mónaco, Nice y quién sabe cuántos pueblos más. Cuatro trenes. Nutella que robé en el hotel como para un ejercito, así que; pan con nutella. Tostada con nutella. Papas con nutella. Nutella sola. Se acabó la Nutella. Dos trenes rápidos, uno despacio y uno varado por más de una hora. La noticia de ya no tener dónde dormir cuando llegáramos. Si es que llegábamos. Después de quince, sí, quince horas de viaje, se leyó bien, parecía que no lo íbamos a lograr. Así trascurrió el día. Esa es Paris. Ella sabe que merece esto y más.
jueves, 29 de diciembre de 2011
Día 62: esto mejora y mejora
Si Venecia fuera hombre, fuera el amor de mi vida. Góndolas. Agua. Antiguo. Canales. Puentes. Cristal de murano. Pizza. Nutella. Italiano. Flash. Vino caliente. Colores. Mascaras. Plazas. Torres. El niño pipón de la rana. Más helados. Pinocho. Mercadillos. Yo no sé pero suspiro porque en este viaje a medida que avanzó la cosa mejora paulatinamente. |
miércoles, 28 de diciembre de 2011
Día 61: Síndrome de Stendhal
DÍA 60: Florencia
domingo, 25 de diciembre de 2011
DÍA 59: byebye Rome
sábado, 24 de diciembre de 2011
DÍA 58: Feliz navidaaaaaaaaaaaaat!
viernes, 23 de diciembre de 2011
DÍA 57: Io solo quero parlar italiano
Estoy en Roma. ¿Puedo ser más feliz? No. Yo soy fácil de impresionar y de hacer feliz. Pero hay momentos en donde siento que lo que vivo es increíble. Ahora por ejemplo. Como si estuviera en un cuento de princesas. Y sí, esto debe ser un cuento y yo lo vivo. Lo disfruto. Porque con el solo hecho de pisar el aeropuerto yo ya me sentía feliz. Sin ver nada, sin sentir nada, sin oler nada. Y es que ¿pasar navidad en Roma? Creo que este cuento tiene demasiado de irreal y real. Pero ni me importa saber si es verdad o mentira. Yo disfruto y suspiro y soy absoluta, completa, increíblemente feliz. Sin saber si tiene más de real o más lo otro, es mío y nadie me lo quita.
-Veronica Zuñiga, una de mis mejores amigas, me prestó su mano-
jueves, 22 de diciembre de 2011
DÍA 56: empaque y vamonos
miércoles, 21 de diciembre de 2011
DÍA 55: así es ella
martes, 20 de diciembre de 2011
DÍA 54: solidaridad
lunes, 19 de diciembre de 2011
DÍA 53: Si tocó, tocó
sábado, 17 de diciembre de 2011
DÍA 51 y 52: casa para el corazón
Sábado y domingo he estado cuidando con recelo enfermarme del corazón. Ni lo puedo creer. Yo, señorita impulso que no piensa en el dolor de mañana sino en la emoción del ahora. Pero así es. No voy a partirme el corazón otra vez, no, no y no. No me permitiré que mi felicidad cambie. Por nada ni nadie. Así que me encerré. No salí. Nada de fiesta ni euforias para no encontrarme(lo) con nadie, ni conocer a nadie ni nada de esas cosas. Me encerré de lo más de delicioso a hacer las cosas que menos me gustan: Cociné. Sí, aunque mi mamá no lo crea. Hice el aseo. ARREGLÉ MI CUARTO. Barrí, tendí la cama y lavé los platos. Además con sabrosura me devoré con pasión desmedida un libro. Escribí. Vi el último capitulo de mi serie favorita, no me bañé y sonreí.
DÍA 50: Aprender
jueves, 15 de diciembre de 2011
DÍa 49: ¿se vale descansar?
miércoles, 14 de diciembre de 2011
DÍA 48: ¿Y el sexo?
lunes, 12 de diciembre de 2011
DIA 47: Aigina
domingo, 11 de diciembre de 2011
DÍA 47: Y la noche...
sábado, 10 de diciembre de 2011
DÍA 46: Μασ δε Ατενασ παρα μι ψοραζον
DÍA 45: ηγφδ γνλκνφλ νκδνς
miércoles, 7 de diciembre de 2011
DÍA 44: letras para mi cabeza
martes, 6 de diciembre de 2011
DÍA 43: Un día de calma al año no hace daño
lunes, 5 de diciembre de 2011
DÍA 42: Me dejó
domingo, 4 de diciembre de 2011
DÍAS 39, 40 y 41: Mis chicas increíbles
jueves, 1 de diciembre de 2011
DÍA 38:¡Diciembre, tirame un beso!
DÍA 37: compritas para el alma
martes, 29 de noviembre de 2011
lunes, 28 de noviembre de 2011
DÍA 35: Corazón hinchado
domingo, 27 de noviembre de 2011
DÍA 34: Una terraza con vida propia
DÍA 33: este va sin foto
Desde que llegué había estado demasiado entusiasmada. No sé si emocionada, o tal vez algo extasiada. Sí, puede ser extasiada. Algo así como abstraída de cualquier realidad. Solo la mía importaba. Caminaba con la vida embriagada. Embriagada de vida.
Claro, nada ha cambiado. Todo aun me produce felicidad. Ganas de reír y estar agradecida con lo que estoy viviendo. Todo me parece absolutamente increíble e indescriptible. Me maravillo en las mañanas y en las noches antes de dormir sonrío y me siento plena. Nunca había estado tanto en el aquí y en el ahora. Por primera vez no me importa lo que va a pasar en un año o lo que pasó hace tres. Estoy aquí, justito aquí.
Pero desde que llegué supongo que no había tenido tiempo de darme cuenta que mi alma seguía en camino. No había llegado. Seguía viajando. Se estaba tomando su tiempo y es que resulta que las almas no van a la misma velocidad que nuestro corazón y cuerpo.
Mis primeras lagrimas en Madrid me dijeron que había llegado. Mi alma me había recuperado. Esa alma loca que seguía en el transito casa – viaje- Madrid- nueva vida llegó a quitarme el estado de embriaguez en el que estaba. Y lo hizo y por eso me entró la resaca. Llegó como quien amanece después de un día de esas fiestas en donde uno deja la conciencia enredada en las sabanas de alguien que uno al día siguiente ni quiere saber quién es. Solo quiere escaparse despacito y sin explicaciones. Así llegó la loca de mi alma.
Llegó a darme de sopetón el buen día de la mano de la soledad. Me recordó que estaba maravillada con todo, pero que ya era hora que me diera cuenta que hay cosas que me hacen falta. Mi mamá por ejemplo. Era la primera vez en casi dos meses que realmente la extrañaba. Joder. Quería llorar. Quería a mi mamá. La alma loca esta llegó a traerme al a realidad. Y la realidad es que a veces, solo a veces, algunos días como ayer, me hace falta que me consientan. Atención. Amor. Mamá.
Y lloré y entonces también empecé a extrañar a mi papá. Y a mi hermano, obvio. Y seguí llorando. Sí, yo. La que alardea de que nunca llora. Me sentí sola, un poco bastante sola, lo acepto. Con alma. Ahora sí es real todo. Ya estamos aquí. Mi alma y yo viviendo en Madrid. Afortunadamente llego mi alma. Ya extrañaba no extrañarlos.
Suspiro, ¡Llegó mi alma!
viernes, 25 de noviembre de 2011
DÍA 32: Primas que son hermanas
jueves, 24 de noviembre de 2011
DÍA 31: Escribir
miércoles, 23 de noviembre de 2011
DÍA 30: Cool españoletes
martes, 22 de noviembre de 2011
DÍA 29: La ilusión de viajar
lunes, 21 de noviembre de 2011
DÍA 28: ¡¡HAY METRO!!
Amo el metro. Rápido, sencillo y seguro. Me siento a esperar a que me lleve a algún destino mientras miro gente. Miro al guapo. Mira al otro guapo. También al guapo que se acaba de bajar y al que se acaba de subir y de todos me enamoro profundamente. Miro gente mientras les invento historias esperando que todos sean igual de felices a mi. Así que suspiro por la gente que veo mientras algo increíble y seguro que puedo coger a cualquier hora y llegar sana y salva, me lleva a algún sitio.
domingo, 20 de noviembre de 2011
DíA 27: PP y PSOE
DíA 26: Fiesta
viernes, 18 de noviembre de 2011
DíA 25: Viernes para el alma
jueves, 17 de noviembre de 2011
DÍA 24: Lea que lea
miércoles, 16 de noviembre de 2011
DÍA 23: Amigas aquí y allá
Lo bueno de que pase el tiempo es que se va descartando lo que no sirve y uno se va quedando con lo de mejor calidad. Así pasa con la comida, los lugares a dónde va, con los amores y obviamente con las amigas. Da alegría saber que las que se tenían que ir desde hacía rato las echamos a patadas. ¡Y que bueno que se hayan largado y que por aquí ni vuelvan! Pero más alegría da saber que hubo unas que han sido aprueba de tiempo. Fieles, amorosas y leales. Así que yo suspiro porque aquí en Madrid tengo a dos de esas amigas. De esas que empezaron conmigo el colegio y siguen aguantándome aquí. Suspiro porque luego de casi 20 años ellas siguen siendo mis hermanas que no son mis hermanas. Porque sé que ellas están aunque no estén, pero esta vez suspiro porque están sin ningún aunque.
*Suspiro*
martes, 15 de noviembre de 2011
DÍA 22: Caos en medio de la paz
lunes, 14 de noviembre de 2011
DÍA 21: Maldito cuatro de su madre
Cuando me entregaron mis primeras notas me di cuenta que la desmoralización viene con el numero cuatro. Cuatro de diez. Gracias. No lloré porque ya sé que Big Girls don´t cry, pero no fue fácil contenerme. Pensé que era buenísima para escribir, pero qué va. No sé nada. Nada de nada. Es que cuatro de DIEZ, o sea. Sin embargo a las malas reacciono y me doy cuenta que es que tengo todo para aprender. La necesidad de dar más y el tiempo suficiente para alzar esos tristes cuatros. Así que suspiro de tristeza por saber que no se lo que pensé que sabía, pero suspiro también de optimismo por saber que sabré.
domingo, 13 de noviembre de 2011
DÍA 18, 19 y 20: Montañas y algo más
jueves, 10 de noviembre de 2011
DÍA 17: TOC TOC
miércoles, 9 de noviembre de 2011
DÍA 16: Celebrando un festivo
lunes, 7 de noviembre de 2011
DÍA 15: Comer o no comer, esa es la cuestión.
domingo, 6 de noviembre de 2011
DÍA 14: Suspiro y suspiro
Pisar un nuevo lugar y disfrutar. Absorber en cada respiro la historia. Perderme entre curiosos turistas. Sacarle foto hasta a lo que no está como para sacarle foto. Comer lo que hay que comer (cochinillo) y reír y sorprenderse y admirar cada rincón. Así me pasó con Segovia. Suspiro porque mi margen de sorpresa es bastante sensible y todo me sorprende, me maravilla, me deleita, me gusta, me hace suspirar.
sábado, 5 de noviembre de 2011
DÍA:13 La party
viernes, 4 de noviembre de 2011
DÍA:12 Mercar casi que a ciegas
La parte divertida es que hay que llenar la nevera y para eso hay un universo de productos nuevos por probar. No es la misma leche, ni los mismas paquetes de papas, ni quesos, ni jamones, ni nada siquiera parecido. ¡Así que a probar!
El reto es comprar en medio de marcas desconocidas cosas ricas y que ademas que YO pueda preparar. Al fin de cuentas algunas veces querré comer algo diferente a sánduche y cereal. Así que mientras pruebo y pruebo suspiro y me reclamo por qué probé esa leche de chocolate que ahora no me deja vivir sin ella.
*Suspira*
jueves, 3 de noviembre de 2011
DÍA 11: Hala Madrid
“Llega ya al Bernabeu, te invito”. El corazón me saltó y suspiré. Suspiré cuando recibí el mensaje. Suspiré en el camino al estadio. Suspiré al entrar al Bernabeu y sentir mi piel como se me erizaba al verlo vestido de blanco, grande, majestuoso y lleno. Suspiré al oír las canciones de los aficionados. Suspiré al ver en cada gol banderas, cantos, risas, felicidad: PASIÓN. Suspiré al ver a los churros de los jugadores. Suspiré sin parar.
El Bernabeu me dejó sin aliento al saber que ese recinto envuelve tanta pasión, tanta vida, tantas ganas. Pasión, vida y ganas que muchos no tienen.
…Y como por si fuera poco, ganó el Real Madrid.
miércoles, 2 de noviembre de 2011
Día 10: ¡Bendita sea la tecnologia!
martes, 1 de noviembre de 2011
DÍA 9: Mi vida es un musical
Nunca había estado en un musical y este, CIEN MENTIRAS DE SABINA, es una de mis razones para suspirar. Una historia de amor adornada con las letras de Joaquín Sabina fue para mí más que unos guapos bailando y cantando. Más que unas tipas demasiado sexis seduciendo el escenario. Más que una buena compañía, más que lo que veía y sentía mientras sonreía. El musical fue para mí, la puesta en escena de la oportunidad de vida que estoy viviendo.
*Suspiro*
lunes, 31 de octubre de 2011
DÍA 8: A lo que vinimos...
Hacerme periodista y escribir con más confianza y determinación, para mi, para ustedes. Por esto suspiro. Porque entre sillas, compañeros, profesores, mesas, computadores, un gran periódico, ganas y muchas, muchas letras por escribir y leer diariamente, veo como se hace realidad lo que por tanto tiempo quise.
*Suspiro*
domingo, 30 de octubre de 2011
Día 7: Paseito para el alma
Y como tengo todo para conocer me fui a conocer Toledo. Y suspiro. Claro que es una razón para suspirar. Un pueblito a una hora de Madrid de ochenta y tres mil habitantes, lleno de subidas y bajadas, antiguo y turistas curiosos por todas partes. Lo disfruté: metro, bus, comí, caminé, fotos, sube, baja, cansancio, risas, más risas, amigos, flash, otra que no salí bien, vamos, todavía no, montañas, museo, puente, ahora sí vamos, las hadas, bus, metro, Madrid, cama, cansancio, felicidad: sueño profundo.
*Suspira*