Ya había oído que Florencia era bella, incluso muchos se atreven a decir que más que Roma. Sin embargo, para mí todas la ciudades tienen lo suyo y Florencia, claramente TIENE LO SUYO. Es como si uno no supiera dónde poner el ojo. Todo es bello: -Aunque los chicos mejor que en Roma, siguen sin cumplir mis expectativas- que los puentes, que las calles, que la comida, que los sonidos, que los atardeceres, que todo. Mares de gente caminando. Edificaciones demasiado vivas. Locales más amables que los romanos. Plazas e historia en cada esquina. Fotos por todas partes. Ojos impresionados. Turistas felices con lo que ven. Florencia, me dio de lo suyo y yo lo supe aprovechar.
José Vives sostuvo las hadas en su mano por horas mientras yo intentaba sacar la mejor foto y los otros se burlaban de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario